Terapias no convencionales

Las terapias no convencionales para el mesotelioma incluyen tratamientos alternativos y complementarios, así como cualquier tratamiento no convencional que use suplementos alimenticios, meditación y cualquier terapia médica que no haya sido corroborada. Estos tratamientos no tradicionales normalmente se administran junto con otras terapias más convencionales, en este caso se llaman conocen como tratamientos complementarios. Más del 70 por cien de los pacientes de cáncer usa un tipo de terapia complementaria, sin embargo hay poca literatura sobre el uso de la misma en pacientes con mesotelioma. Los tratamientos alternativos se refieren a aquellas técnicas que pretenden remplazar a los tratamientos establecidos, tales como la cirugía, la radiación y la quimioterapia.

La lista de terapias alternativas y complementarias es extensa y puede ser dividida en dos grupos: curación manual y mente, cuerpo y espíritu. Otros tratamientos alternativos incluyen suplementos en la dieta con vitaminas naturales y minerales. En cualquier caso debe ser seguidas bajo supervisión médica. A continuación se indican algunas alternativas:

Vitamina C

El premio nobel Linus Pauling fue el mayor defensor de la efectividad de la vitamina C como tratamiento alternativa al cáncer. Sin embargo, hoy por hoy el uso de la vitamina C es uno de los tratamientos alternativos más controvertido. Trabajando junto con un médico en Escocia, Pauling trató a pacientes con cáncer con Vitamina C, siendo óptimos sus resultados. No obstante hay otros estudios que evidencian la nula efectividad de esta vitamina.

Pauling mantuvo la creencia en la efectividad de la vitamina C, basando la misma en el hecho de que la vitamina juega un papel importante en distintas reacciones biomecánicas del cuerpo. Es esencial en el crecimiento de la efectividad del sistema inmunitario y ayuda a crear colágeno, que es una proteína que conecta y apoya a tejidos tales como los tendones, los ligamentos y los cartílagos. El colágeno además ayuda a reforzar los músculos, los vasos sanguíneos y los huesos. Se cree que el colágeno ayuda a prevenir que el cáncer se convierta en metástasis.

Ukrain

Es un compuesto parcialmente sintético que proviene de la celidonia, una hierba bastante común. Ésta contiene una serie de alcaloides y se combina con un fármaco de quimioterapia llamado Thiotepa para hacer Ukrain, que se administra a los pacientes por vía intravenosa. Se ha usado en estudios médicos de gente con colonrectal, vesícula inflamada, y cáncer de pecho y de páncreas. En una revisión de estos estudios se demostró que los pacientes habían mejorado, si bien la metodología de los estudios era defectuosa. Se necesita una investigación más rigurosa para que se puedan exponer sólidas conclusiones.

Astrágalo

La raíz de la planta Astrálago que se encuentra en China se ha usado en la medicina desde hace miles de años para regenerar la energía. Hoy en día los chinos creen que una inyección de Astrálago en combinación con quimioterapia puede reducir el crecimiento del tumor, estimular la función inmune y aliviar alguno de los efectos secundarios de la quimioterapia. Una revisión sobre 34 juicios clínicos sobre el Astrálago concluyó que esta hierba aumentaba la efectividad de la quimioterapia basada en el platino, pero necesitan hacerse más estudios.

Uña de gato

Esta vid de Sudamérica cuyo nombre científico es Uncaria tormentosa tiene delgadas espinas en la base de cada hoja que se parecen a las uñas de los gatos. La medicina tradicional peruana ha usado esta planta durante años para tratar el cáncer, la artritis, la gastritis y otras enfermedades epidémicas. Los hallazgos en los estudios convencionales que se han hecho sobre la uña de gato son conflictivos, aunque en 1998 un estudio confirmó sus efectos antiinflamatorios.