Radioterapia

Este tipo de tratamiento goza de larga duración en lo que al tratamiento del mesotelioma se refiere. A lo largo de los años, esta terapia ha evolucionado hacia un sistema mucho más exacto, como resultado de los grandes avances. Es habitual que los pacientes de mesotelioma sean tratados con una combinación de radioterapia y de quimioterapia. La radioterapia se usa para eliminar el tejido cancerígeno después de que el paciente se halla sometido a una cirugía. En algunos casos, la radioterapia se usa para aliviar los síntomas del mesotelioma de manera que la calidad de vida del paciente sea mejor.

Radioterapia externa

Hay dos tipos de radioterapia para el tratamiento del mesotelioma. La radiación externa es la más conocida y la más usada. Mediante una máquina se focaliza la radiación en la zona del cuero que está infectada con cáncer, sin que el paciente tenga contacto físico con la máquina. Este método de tratamiento no es doloroso y normalmente se hace de manera ambulatoria.

La radiación que se usa para matar a las células cancerígenas es muy potente. De ahí que como resultado, durante el proceso también se eliminen células sanas, lo que sin duda causa un efecto secundario desagradable. La duración del tratamiento dependerá del tipo y de la localización del cáncer. Normalmente el tratamiento va desde cinco sesiones por semana hasta una cada varias semanas. Cada sesión suele durar unos 30 minutos.

Braquiterapia

La braquiterapia es la segunda forma de radiación que se usa para tratar el mesotelioma. Esta terapia supone disparar directamente en el tumor cancerígeno. Es un procedimiento nuevo, pero está demostrando resultados prometedores para los pacientes con mesotelioma. Este tipo de radiación es más exacta por lo que son pocas las células sanas que se destruyen durante el proceso.

La braquiterapia supone introducir varillas o semillas radioactivas en el sitio del tumor. Se usa anestesia general, utilizando catéter para implantar las semillas o varillas. Los implantes se pueden retirar después de un breve periodo de tiempo o dejarlos de manera permanente. Las varillas dejan de emitir radiación pasados entre tres doce meses. Este tipo de tratamiento se suele administrar de manera ambulatoria.

Efectos secundarios

Ambos métodos de radiación tienen efectos secundarios como es la fatiga severa, piel seca o enrojecida o problemas digestivos. No obstante la radioterapia tiene menos efectos secundarios que la quimioterapia y es una opción de tratamiento válida.